Ha llovido todo el día. No suelo pintar cuando llueve. No me gusta el color bajo la luz gris-azulada de las nubes. Pero tenía prisa por acabar estos dos cuadros y lo he hecho esta tarde, a todo riesgo.
Aunque son gemelos no tienen eje de simetría alguno. El motivo pertenece a una casa en la Calle Governador Vell, en Valencia. Recuerdo que estaba en la tercera planta y que era grande, por lo menos 100m2. Todas las habitaciones tenían baldosa hidráulica y, en general, tanto la casa como el suelo estaban hechos ruinas. Recuerdo que el pavimento se ondulaba de una forma que sólo he visto cuando los árboles de los parques empujan el empedrado de la acera. Daba miedo.
Desde el jueves estarán expuestos en Madame MiM. Al final de la Calle Sevilla (vlc)